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En ocasiones sueño con ser “inventor”, crear algo de la nada, como un mago que al meter la mano en su chistera no saca un conejo sino otra cosa que no sabía que estaba allí. Inventar algo aunque sea por casualidad.

Como artista gráfico o ilustrador, siempre he pensado que hay que hacer las cosas intentando ir más allá. Ser valiente y lanzarme para acometer proyectos que me superen. Por eso me considero, más que un inventor que a día de hoy no he inventado nada, un ilusionista esperanzado con sacar algo de mi sombrero. De ilusiones también se genera vida y esto nos puede aportar la energía suficiente para diseñar estructuras con materiales tan celestes como para levantar iglesias.

Mi trabajo, en estos años de ilustrador digital, ha sido investigar sobre alguna sustancia con la que pudiera elaborar mis dibujos. Algo parecido al escultor que busca nuevos materiales para crear sus obras o al pintor que fabrica sus propias pinturas. En mi caso, debido a que mis herramientas son digitales, he tenido que buscar en mi chistera y sacar una sustancia a la que he denominado “Silicone Pie”. Es un material licuado, hecho de colores y líneas, difícil de manipular y en constante movimiento. Esto quiere decir que las obras no terminan nunca de fluir, son cambiantes y se pueden direccionar hacia cualquier parte. Se pueden deformar, estirar y juntar unas partes con otras. Es como crear una escultura con un material semilíquido. A veces es una locura y un caos el manejar todo esto, pero por otro lado le da al trabajo una expresividad muy enérgica y vivaz. De esta forma he solucionado en parte, el problema que suele dar un medio digital, que puede resultar muy controlado y frío.

Otro valor importante que merece la pena destacar del Silicone Pie fue el de encontrar un símil sobre el material del que está hecho el hombre moderno. 

En la línea que define Bauman, el hombre busca su libertad despreocupándose de lo que pasa a su alrededor y buscando la inmediatez. El problema que encuentra todo lo que es sólido es la individualidad que nos mueve como una sociedad líquida. La búsqueda de identidad, para Bauman, es una constante lucha por detener el flujo.

Basándome en esta idea, la intención principal es jugar con ese flujo para después tener la capacidad de aislar y desacelerar al individuo. No hay en el material ningún elemento sólido. Se hace difícil trabajar con algo que no obedece, que se excede y posee una inercia indómita y caprichosa. Hay que ser paciente y amasar bien las partes para conseguir una textura adecuada. Hay que cribar el material con las herramientas del hechicero para extraer algo de valor. A partir de aquí hay que seguir el proceso de búsqueda y experimentación con este pastel de silicona, mezclando y cocinando distintas recetas para obtener nuevos resultados de búsqueda.

Sin lugar a dudas, es una teoría algo floja y posiblemente dicha sustancia no sea más que una mentira, pero yo no he inventado absolutamente nada, no soy inventor. Soy un ilustrador ilusionado o un artista gráfico con esperanzas o un alquimista de pacotilla … Lo que sí queda claro es que de ilusiones también se vive y si no, habrá que seguir buscando en la chistera, a ver qué sale.

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Occasionally, I dream of being an “inventor”, creating something out of nothing, as a magician who puts his hand in his top hat and he does not get a rabbit but another thing he did not know it was there.  To invent something even though by chance.

As a graphic artist or illustrator, I have always thought that one has to do the things by trying further. Being brave and leap to undertake projects that exceed me. This is why I consider myself more than an inventor who has not invented anything yet, an illusionist who hopes to get something off my hat.  Life is also created by illusions and this fact may provide enough energy to design structures with such celestial materials as to build churches. 

In these past years, my work as a digital illustrator has been based on a research about substances which I could work with on my drawings. Something similar to the sculptor who looks for new materials or the painter who makes his own paints.  In my case, due to the fact that my tools are digital, I have had to look for something inside my top hat and get a substance off it, which I have called “Silicon Pie”.  It is a liquefied material, made by colours and lines, difficult to handle and in constant movement.  This means that the works do not stop flowing, they are unstable and can be operated to any direction.  They can be twisted, stretched out and gathered from different sides. It is similar to create a sculpture but with semiliquid material.  Sometimes, managing all this is crazy and chaotic, but at the same time it gives the work an energetic and bright expressivity.  Thus, I have been able to solve the main problem of a digital environment which is that it is controlled and cold.

Another important aspect in Silicon Pie that is worth to mention is the fact that it is a symbol of the material that the modern individual is made with. In line of Bauman ideas, human beings search for liberty without worrying about what happens around them and looking for immediacy. Every solid object faces a problem which is the individuality that moves us as a liquid society. According to Bauman, the identity search is a constant fight to stop the flow.

Based on this idea, my main intention is to play with that flow so that later I may be able to isolate and decelerate the individual. There is not a single solid element in the material.  It is difficult to work with something that does not obey, oversteps the mark, and owns an untamed and fickle inertia. One has to be patient and mix all the ingredients to get a suitable texture.  The material has to be sifted with the wizard tools to extract something worthy. From this point, the search and testing process has to go on with this Silicone Pie, mixing and cooking different recipes to get new results.

Undoubtedly, this is a weak theory and this substance might be just a lie, though I have not invented anything, I am not an inventor.  I am an excited illustrator or a graphic artist with hopes or a trashy alchemist…What it is clear is that one can live in a dream world and if not, I will go on looking for something in the top hat and see what I get…